¿Cómo detectar si tu gato tiene una infección urinaria?

Una infección urinaria es común en un gatito y se presenta con mayor frecuencia en gatos adultos obesos, que carecen de espacio para ejercitarse o se encuentran en condiciones emocionales de poca tranquilidad.

Estas enfermedades pueden presentarse por diversos factores e infecciones como la cistitis: que es la inflamación de la vejiga; nefritis: inflamación de los riñones y urolitiasis: cálculos urinarios (pequeñas formaciones de piedras).

Señales de posible infección urinaria en mi gato.

Estos son los siguientes comportamientos que podría presentar tu gato si tiene una infección urinaria:

  • La mascota deja de tomar agua y no quiere comer..
  • Si presenta alteraciones en su estado de ánimo, no defeca, está aislado, apático o   se esconde.
  • La ausencia de orina en su arenero.
  • Puede presentarse orina de color rojo o color rosa.
  • Evita su arenero para orinar, pero lo hace en pequeñas cantidades y por muchas partes (ya que no se puede aguantar).
  • Si tu gato no quiere orinar o ha pasado un día sin orinar.

Es muy importante que acudas a tu veterinario con prontitud si presenta alguno de estos síntomas.

Diagnóstico y tratamiento.

El médico veterinario, podrá recomendar antibióticos para atacar la infección y analgésicos, pues la infección urinaria le producirá mucho dolor.

Además de los medicamentos que el médico veterinario recete, es importante que también haga recomendaciones para una alimentación adecuada que le ayude a mejorar el pH y disminuir la sal, para que tu gato pueda orinar de forma correcta.

Estos tres elementos juntos, permitirán que tu gato se recupere de la infección urinaria.

Prevención.

Se debe estar al pendiente su hidratación y tu gato debe tomar mucha agua durante el día, puedes identificar si le gusta fría o al tiempo, si gusta beber de su recipiente o si prefiere el agua en movimiento.

Es de suma importancia evitar que tome agua del inodoro.

Un punto muy importante es cuidar su alimentación, además de sus croquetas clásicas (y de buena calidad como las Premium) debes ofrecerle alimentos húmedos por lo menos dos veces por semana, ya que contienen menos cantidades de sal y más agua, por lo tanto tu gato orinará con más frecuencia.

Este cuidado puede ser realizado desde que tu gato es un bebé, para prevenir que cuando tu gato sea adulto tenga una infección urinaria.

 


MVZ Esp Ingrid James
Médico veterinario especialista en cirugía y medicina interna.